Como dijo la industria: Crash!

Por Flor Nerone

ILUSTRACIÓN DE popi manrupe

Pasa algo raro con el disco nuevo de Charli XCX. Como la mayoría de les artistas mainstream en el último tiempo, ella estuvo promocionándolo y lanzando previamente una serie de simples, todos con video incluido. Fueron cuatro temas en total antes de que saliera el disco completo. Pero algo raro pasó después del tercero.

No es inusual que Charli plantee cosas que dentro del mainstream son posibles pero a la vez arriesgadas y pasa desde hace un tiempo en su carrera, tanto de manera consciente como no, aunque por lo que entiendo, más que nada de manera consciente. Me gustó que en una nota ella se definía como «musician and smart business woman». Lo que me fascina de lo que hace es que, me imagino, es muy difícil vivir interesdx por el equilibrio entre hacer algo nuevo, o que se sienta poco usual, y que le guste a mucha gente, y ella definitivamente lo logra. Cada vez más, Charli estiró las fronteras del pop, por ejemplo trabajando con productorxs y compositorxs de vanguardia como Sophie, A. G.Cook y Dylan Brady de 100 gecs, o haciendo un disco de principio a fin en cinco semanas como una manera de reinventarse y desafiarse, o al menos mantenerse con vida, durante la cuarentena. No se puede describir, es mejor ir y escuchar sus discos, yo los escuché del anterior al primero y me volví fan, me parece una artista espectacular, de las mejores sin dudas.

Por otro lado, están sus fans, lxs angeles de Charli. De una parte a este tiempo también empezó a ser común que cada artista o banda le dé un nombre de fantasía a su núcleo duro de seguidores, es tradición de una cultura que en oriente lleva varias décadas y cuyo caso más popular debe ser el army de BTS y en occidente lxs Little Monsters de Lady Gaga. Ahora todo el mundo quiere generar esa idea de comunidad y un poco me aburre, enseguida se quiere pegarles un nombre aunque quizás no sea mucha ni tan fiel la gente, ni se genere algo que lxs defina como comunidad. Pero lxs de Charli sí son constantes desde hace tiempo, a nivel global y más a cada paso de su historia, por lo que entiendo. Otra cosa que pasa mientras más aumenta su fama, y que creo que es común, es que algunxs pueden llegar a volverse bastante pesadxs, no encuentro otro modo de decirlo. Es una de las características más conocidas de su fandom. Aun así, o al menos hasta cierto punto, ella dijo que amaba a sus fans porque tenían un sentido del humor tremendo, y compartían eso. Otra vez dijo que eran lxs mejores porque muchxs son de la comunidad lgbt+, según ella las personas con el mejor gusto. ¡Tomá, Grucho Marx! Charli simplemente dijo: «me gustan las personas a las que les gusto porque tienen buen gusto», same.

Hay una gran diferencia entre el disco anterior de ella y el material nuevo realmente grande. Son básicamente los dos polos de su música, al menos hasta ahora. Charli empezó siendo una artista muy «de discográfica», sus primeros hits son icónicos, pero en comparación a lo que vino después, se nota que fue queriendo hacer música cada vez más personal, con el detalle de que, según ella, una de las cosas que más le gusta y mejor le sale es la joda, por lo que resulta personal a la vez que perfectamente pop. Por eso sus canciones son cada vez más particulares sin perder un eje. 

Yo no sé bien qué fue primero, si la insistencia de sus fans con el hecho de que ella «debería ser más reconocida», sus ganas (que son las ganas naturales de cualquier artista) de crecer cada vez más, o el hecho de que este disco va a ser el último del contrato en la compañía donde estuvo la mayor parte de su vida. Mirando el camino recorrido también debe ser natural el miedo de no saber cuánto tiempo más vas a poder mantenerte tan arriba. Pero lo que sí se sabe es que, y ella fue la primera en decirlo, ésta es su era más «reina del pop». Es algo super explícito de una manera que también se me hace única: temas más simples y directos, desde el sonido y la estructura, videos con coreografías tradicionales y perfectas, y siempre, siempre, siempre un look infartante, mostrando todo lo posible y, por algún motivo, casi siempre en tonos oscuros y descalza, eso me encanta. Supongo que ni en el cielo ni en el infierno se usan plataformas.

Charli es una ícona del pop, pero una no muy tradicional, con una manera de mostrarse menos hermética que la mayoría, porque también ahí su forma de publicitarse y conectarse con el mundo es menos prefabricada, como si no hubiese mucha preocupación de salirse de lo que representa como marca o producto. Gaga, por ejemplo, puede decir cosas como «no me acuerdo de Art Pop» o definir a alguien como «talented, brilliant, incredible, amazing, show stopping, spectacular, never the same, totally unique, completely not ever been done before, unafraid to reference or not reference, put it in a blender, shit on it, vomit on it, eat it, give birth to it» y volverse viral al instante y para siempre, un poco porque expresiones así de random o personales no son en ella públicamente tan comunes, si bien tiene un historial hermoso de declaraciones fuera de lo común en entrevistas. Muchas veces funciona como marca. Pero creo que el camino de Charli fue otro, se muestra como una mortal más, riéndose de ella misma (en un vivo en un festival re importante se presenta como «una de las mejores 15 artistas del mundo»), llorando en un live de Instagram (imágenes que después pasaron a formar parte del documental del disco que estaba haciendo en ese momento) y cosas por el estilo. Creo que hoy por hoy la figura de la estrella pop inalcanzable está bastante cuestionada, hay una parte muy visible y ambigua entre los límites del arte, la plata y la explotación y salud de lxs artistas. Es como un vértigo que en el mainstream está siempre detrás.

Cuando Sophie murió, fue muy común entre lxs amantes de la música preguntarse por las declaraciones de Charli, específicamente cuándo iba a hablar, porque se sabía que eran muy amigas y habían hecho grandes cosas juntas. Todo esto aun me pone un poco triste. Todxs o la mayoría de lxs musicxs cercanxs a Sophie dijeron algo inmediatamente en las redes, comentando la gran pérdida que era, tanto en lo personal como en lo artístico. Pero Charli no decía nada. Pasado un tiempo, publicó una nota de texto diciendo que obviamente había estado muy mal, que antes no había podido decir públicamente nada y que tampoco le parecía correcto que el público le exigiera eso, incluso que había cosas que no iba a hacer públicas, cosas que le pasaban que decidió no compartir y dejarlas en un diario íntimo.         

Me acuerdo que luego de subir uno de los simples nuevos, Charli puso en Twitter algo así como “sigan compartiendo este tema para que crezca porque acuérdense que mientras mejor me vaya con esto, más cosas avant-garde y diferentes a esto voy a poder hacer en el futuro”. Me re llamó la atención ese nivel de lucidez y sinceridad. Muchxs de sus ángeles se enojaron porque sintieron que estaba diciendo que sus canciones, o incluso el pop más tradicional, eran una porquería. Creo que un poco fue así pero no le importó, más allá de que ella habla siempre de su fanatismo por el pop, diciendo que su artista favorita es Britney o su canción favorita es “We’re Going to Ibiza”, de Vengaboys. Después, más adelante, antes de que muriera, también dijo que su artista favorita de todo el mundo era Sophie, me gustó mucho ese gesto. 

A lo que quería llegar con esta nota. Antes de que salga “Baby”, el último corte previo  al lanzamiento de Crash, Charli subió un comunicado contando que no se encontraba nada bien, que se sentía básicamente auto-exigida para lograr sus metas pero también muy exigida y cuestionada por sus propixs fans en las redes, cada vez más, al punto que tuvo que subir eso y pedir que reflexionaran un poco, recordándoles que muchas de las decisiones artísticas que está tomando para solventar económicamente esta etapa quizás no son ideales o del agrado de todxs, pero son para poder literalmente crecer y promocionarse mejor, viajar y tocar más alrededor del mundo, o poder hacer más adelante mejor música todavía, para poder tener una plataforma aún más sólida desde donde seguir intentando composiciones únicas y desafiantes. 

Era visible que, si bien la mayoría estaba amando el nuevo material, también muchxs fans estaban teniendo problemas con su búsqueda que había pasado de ser cada vez más personal a, de repente, principal y evidentemente comercial. ¿Y si Charli esperó todo este tiempo para intentar moverse full escala industrial porque recién ahora siente la madurez necesaria para hacerlo de una manera personal? ¿Es un pecado pop si ya priorizó bastante la autenticidad en su arte y ahora prefiere relegar un poco de eso, sabiendo que un básico ya lo tiene conquistado y le quedan en otros ámbitos otras cosas por ganar? No sé, creo que eligió en este momento experimentar de esta manera y, por ejemplo, ya visibilizó algo muy fuerte del lugar del público en el mainstream, siempre exigiendo ser satisfecho a la perfección, con exigencias que van subiendo gradualmente hasta llegar a niveles más y más inalcanzables, incluso al punto de poner en jaque la integridad de la misma persona que ese público idolatra. Seguro pasa en otros espacios y de otras maneras, yo lo vi acá. También pasa lo contrario, la veneración desde un fanatismo religioso que asusta, pero ese es otro tema. 

Salió el cuarto video del disco y, como suelo hacer siempre, cuando terminó, bajé a ver los comentarios (¡maldito vicio!) y me pareció re llamativo que casi todos, o todos, eran HIPER amorosos, por algún motivo lo sentí más de lo normal, y desde otro lugar. Quiero creer que es por lo que contó, ¿será? Ojalá que sí. Incluso algunxs decían cosas como «me hubiese gustado que los temas nuevos duraran más (son todos de menos de 3 minutos), pero es por los streams, lo re entiendo». El lugar del público en el mundo del arte es importantísimo y no sé si muy tenido en cuenta. A mí misma me pasó que las primeras veces que escuché los temas nuevos directamente no me gustaron (deberé hacerme el test de covid porque me falla el gusto, quizás???) pero cada vez que me aparecen en alguna playlist los dejo y ya los amo. Quizás en algunas cosas tenemos que dejar de ser tan ridículamente exigentes y así vamos a disfrutar más.   

En la versión deluxe del disco aparece un tema llamado “Sorry If I Hurt You”, o en español “Perdón si te lastimo”, que según Charli durante mucho tiempo fue el nombre provisorio del disco, y me gustó pensar que podría ser perfectamente algo que le dice ella a sus fans esperando, también, en un intento de relación sana, que ese mensaje vuelva de sus ángeles a ella. En lo personal quiero que podamos compartir con lxs artistas que nos gustan sin arruinarles la vida ni dejar la nuestra a cambio, definitivamente el pop debería seguir siendo un lugar de fantasía y experimentación pero, más que nada, un lugar seguro para todxs. (Aunque… bueno… por otro lado, el último tema del deluxe, el que cierra definitivamente el disco, ahora sí está explícitamente dedicado a sus fans y repite al infinito… «no me importa una mierda lo que pienses, fuck you». Pero Charli, veníamos tan bien!!!! Casi casi.)

Crash salió hace unas semanas, fue su primer disco en quedar número uno en los rankings de ventas de su país y sigue creciendo con presentaciones en vivo por todas partes, siempre agotadas. Hermoso.

5 de julio de 2022